Emiliano Figueroa Larraín
Fue una de las personalidades melipillanas que estaba llamada a figurar brillantemente en la Historia de Chile y que sin ruido nació a la vida política que le reservaba tan grandes honores.
Nació en Santiago el 12 de Junio de 1866, hijo de Francisco de Paula Figueroa Araos y Rosalía Larraín Echeverría. Estudió en el Colegio San Ignacio y después siguió la carrera de Leyes de la Universidad de Chile, en 1889 se recibió de abogado. Se desempeñó como Secretario de la Intendencia y entre 1900 y 1906 como Diputado por Victoria y Melipilla.
Colaboró en el gobierno de Pedro Montt como Ministro d Justicia e Instrucción Pública (1907). Asumió como Vicepresidente de la República entre septiembre y diciembre de 1910.
Don Emiliano Figueroa fue administrador de la hacienda de Chiñihue, propiedad del rico terrateniente Don Claudio Vicuña.
Muy llano y campechano, atendía personalmente los trabajos agrícolas, montado a caballo como buen huaso y con todos los arreos correspondientes. Era afable en sus modales.
Un día dijo a un periodista Melipillano: “Don Claudio ha dispuesto que yo deje la administración de Chiñihue porque seré el administrador general de todos sus fundos a lo largo del país, pero advierte también don Claudio que este administrador general debe estar en la Cámara. Es así como, sin pretenderlo ni desearlo, soy ya candidato a diputado por esta región y usted, sabe que todo candidato que se respeta debe presentarse con el apoyo de un periódico. Yo no me creo con méritos y conocimientos para el cargo, pero como vemos casi siempre tanta variedad de ganado entre los representantes, también creo que cualquier hombre trabajador y bien intencionado puede hacer más de algo en beneficio del país.”
Así nació la candidatura de Don Emiliano Figueroa Larraín (que llegaría a ser Presidente de Chile) y junto con ella el modesto periódico “El Deber”, cuyo primer número salió en Melipilla el 25 de noviembre de 1899.
Entre 1911 y 1914 fue Ministro Plenipotenciario en España y después en Argentina, donde se mantuvo siete años.
En 1918 colaboró en la firma del Tratado de ABC en 1920 fue designado conservador de Bienes Raíces de Santiago.
El 24 de Octubre de 1925 Figueroa derrotó por amplio margen a su contendor, el Dr. José Santos Salas, en las elecciones presidenciales, y juró como Presidente de la República el 23 de diciembre de ese mismo año.
Entre las obras del gobierno de Figueroa, se encuentran la modernización de la administración pública y la creación de la Contraloría General de la República.
El 4 de Mayo de 1927 renunció a la Presidencia de la República.
En 1928, aceptó ser embajador de nuestro país en Perú.
En 1930, volvió a nuestro país y asumió la presidencia del Banco Central.
El 16 de Mayo de 1931, sufrió un accidente de automóvil que le provocó la muerte.